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Pensamiento, una herramienta esencial para la supervivencia

Pensamiento, una herramienta esencial para la supervivencia



¿Por qué los seres humanos fueron hechos para pensar? Tan pronto como me desperté esta mañana, esto vino a mi mente. Lo que pensé durante el servicio: El servicio es pensar en Dios. El pensamiento fue hecho para recordar a Dios. Si todo en nuestra vida nos fuera dado, la única cosa que deberíamos pensar es en ‘Dios’.


Durante el servicio, me senté y continué pensando. ¿Por qué los humanos no pueden evitar adorar a Dios? No, ¿por qué los humanos fueron hechos para continuar pensando y mirando a un ser trascendental? ¿Alguna vez has pensado en esto?



1. Los seres humanos son seres débiles

Es porque los humanos son seres ‘débiles’. En el reino animal, el ser humano es uno de los animales más débiles. Sólo observando físicamente, los humanos son extremadamente débiles. Si un ser humano fuera un animal, sería increíblemente vulnerable. Esto se debe a que nuestras limitaciones son muy claras. No somos altos, no corremos rápido y no somos particularmente fuertes. Por lo tanto, los humanos, comparados con un trozo de tierra, realmente no son nada.

Cuando observamos a través de las Escrituras, la parte más convincente es en Eclesiastés.

Eclesiastés 3:19

“El destino de los hijos de los hombres y el destino de los animales es el mismo. Como muere uno, así muere el otro; todos tienen el mismo aliento. El hombre no tiene ventaja sobre los animales. Todo es vanidad.”


Al final, tanto los humanos como los animales vienen del polvo y al polvo vuelven. El cuerpo no tiene significado. Incluso los grandes dinosaurios del pasado no podían hacer nada frente a la muerte. Ante la naturaleza que excedía su fuerza, eran seres indefensos. No podían escapar de la naturaleza.


2. El pensamiento es una herramienta de supervivencia

El pensamiento es sabiduría. Es conocimiento. Es inteligencia. En otras palabras, **el pensamiento es una herramienta esencial para la supervivencia**.



He visto a muchas personas vivir sin pensar en nada. Luego, incluso si quieren pensar, muchas personas no pueden hacerlo. Especialmente al observar a muchos niños en el Tercer Mundo, me he preguntado: “¿Por qué no piensan en absoluto?”. Naturalmente, al conocer a varias personas, escuché a un médico misionero de los Estados Unidos que vino a hacer trabajo voluntario.

“En el Tercer Mundo, especialmente en áreas subdesarrolladas, los niños heredan la desnutrición. Primero, los padres no tienen una dieta equilibrada. No pueden tenerla. La leche materna de una madre que no tiene una dieta adecuada tampoco es nutritiva. Así es como se hereda la desnutrición. Cuando los niños crecen, no ingieren naturalmente las vitaminas y minerales importantes, por lo que su desarrollo cerebral no es completo. Esta falta de función cerebral es un factor que impide que piensen profundamente.”

Esto me sorprendió. Se convirtió en uno de los motivos de nuestra ONG. No es que no quieran hacerlo, es que no pueden. Esa es la parte realmente triste.

Creo que su herramienta de supervivencia está aproximadamente en la Edad de Piedra. Me di cuenta una vez más de que ser capaz de pensar es un lujo que disfrutamos.



3. Pensar es ser humano

Casi no hay seres vivos, aparte de los humanos, que puedan pensar. Ningún ser vivo puede pensar tanto como los humanos. Otros animales pueden tener algo de pensamiento en una parte instintiva, pero probablemente eso es más ‘memoria’. La ‘memoria’ puede estimular el instinto de protección y actuar como un medio de autopreservación. La ‘memoria’ se convierte en ‘experiencia’.

Los humanos son diferentes. Hemos recibido la capacidad de pensar y desarrollar y crear algo. Es decir, hemos recibido la capacidad de ‘pensar’, que es una de las características únicas de Dios. No podemos desentrañar los pensamientos profundos de Dios, pero en los momentos de la creación, Dios planeó muchas cosas a través de sus pensamientos y mostró los resultados a través de su palabra. Y dijo que creó al hombre a su imagen para que gobernara toda la tierra y todo lo que se arrastra sobre ella. Este gobierno sólo tiene valor cuando pensamos. Dios quería que los humanos ‘pensaran’. En otras palabras, pensaran en Dios.

Los humanos sólo pueden ser tratados como humanos cuando piensan. Cuando el pensamiento se aplica de manera útil en la vida, los humanos pueden gobernar muchas cosas. Pueden mover y controlar muchas cosas, desde sus instintos hasta sus emociones y el medio ambiente. Esa es la fuerza del pensamiento y la fuerza humana.



El pensamiento puede ser interpretado desde muchos ángulos, pero el papel importante del pensamiento es saber que uno es humano. Cuando se creó el primer fruto de la humanidad, supieron que eran humanos. Después de ver muchas criaturas y comunicarse con Dios, se dieron cuenta de que fueron creados para tener comunión con Dios. Los pensamientos humanos fueron hechos para recordar a Dios. No es una simple memoria, sino al ver las criaturas, pensar en la grandeza y majestad de Dios, y alabar, adorar y rendir culto como resultado.

Pensar es adoración. Al recordar a Dios y adorarlo, en ese momento, elevamos creativamente su nombre. Esa es la esencia del pensamiento.



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