31.ago.2024

2 Tesalonicenses 3:6-18

¿Qué entiende?

1. ¡Saber hacer las cosas! : No te canses de hacer el bien. Hace unos días, un conocido en Corea me contactó por la noche. Su esposo, mientras estaba en Corea, se encontró con un extranjero en la calle y decidió ayudarlo, pero no había nadie que pudiera cuidarlo. Instintivamente, sentí algo incómodo, ya que el extranjero era de la misma nacionalidad del país en el que resido actualmente. Pedí a otro amigo extranjero en Corea que hablara con esa persona. Finalmente, resultó que el extranjero solo quería aprovecharse de la persona coreana, sin ninguna necesidad real.

    Entiendo que cuando nos encontramos en situaciones desconocidas, es natural querer recibir la ayuda de alguien. Sin embargo, no siempre debe ser así. Con el tiempo y a medida que la situación se aclara, necesitamos desarrollar la capacidad de actuar por cuenta propia.

    Cada persona tiene la responsabilidad y la capacidad de manejar lo que se le ha encomendado. Todo tiene un precio, y aunque algo parezca no tener valor, en realidad tiene "valor". Por lo tanto, debemos mostrar sacrificio para pagar ese valor, lo cual se manifiesta en el trabajo y el esfuerzo.

    Podemos actuar sin pensar demasiado, pero observando a aquellos que han recorrido el mismo camino antes, podemos aprender cómo actuar. Esta es la vida de quienes imitan a los demás. En lugar de hacer cosas sin sentido y vanas, o ser reprendidos por estar ociosos por no saber cómo actuar, seguir los pasos de los que nos han precedido hará que nuestro esfuerzo valga la pena.

    "Y el mismo Señor de paz os dé siempre paz en toda manera. El Señor sea con todos vosotros" (2 Tesalonicenses 3:16).